María García Bodas | El equipo

María G. Bodas

Terapeuta Felina, formadora.

Nací en el barrio madrileño de Vallecas en aquella época en la que solo existían dos canales de televisión y los niños nos divertíamos viendo Barrio Sésamo y jugando en la calle.
Desde pequeña fui una niña sensible, risueña y amante de los animales, me pasé la infancia pidiendo a mis padres un perrito, que llegó muchos años después, cuando ya era capaz de hacerme cargo de cuidarle y sacarle a pasear.

En el año 2013, después de haber sido mamá por primera vez, comencé a ser voluntaria en la perrera de Torrejón de Ardoz, fue entonces cuando decidí superar el sentimiento de desolación que me producía ver la situación de los animales abandonados para poder ayudarles durante el tiempo que permanecían allí, y fue allí donde conocí lo mejor y lo peor del ser humano, también descubrí a los gatos, aprendí a cuidarles, a saber cuáles eran sus necesidades y a enamorarme de una especie tan poco entendida, tan poco valorada en muchas ocasiones y que tanto tiene para darnos.

En abril de 2015 llegó Fidel a la perrera, un gatito negro, cariñoso y confiado que siempre supo que yo sería su compañera de vida, seguimos juntos luchando con todo lo que la vida nos ha enviado, que no ha sido poco ni fácil pero que nos ha hecho ser quienes somos.

Mi historia

con Terapia Felina

Fue allí también donde conocí a Laura y a Terapia Felina y su especial y certera visión sobre los gatos y las protectoras.

Años después, cuando mi etapa de voluntaria estaba finalizando, llegó a mí por casualidad, de la mano de mi amiga Cris, la Formación de Terapeuta Felina Profesional, me pregunté si podría llegar a conseguirlo y por un momento dudé, pero luego pensé, ¿por qué no? y con el apoyo de mi familia me lancé a por ese nuevo reto.

Fueron dos años maravillosos en los que viví un embarazo, mi segunda maternidad, una mudanza y una evolución personal enorme.

En esos dos años aprendí muchísimo de gatos, de cómo son, cómo se sienten, cuál es su relación con los seres humanos y cómo puedo ayudarles a ellos y a sus familias a llegar a un punto de comprensión y conexión mutuo.

Así que aquí estoy, cumpliendo sueños, continuando con el camino que comencé en 2013 en protección animal, con el propósito de seguir ayudando a los gatos y a sus personas en todo lo que esté en mi mano.

Desde el año 2022 tengo el privilegio de formar parte de Terapia Felina como Terapeuta Felina y formadora, dando soporte en las consultas que recibimos, también junto con mis compañeras y Laura estamos dando forma a nuevos proyectos de formación para ayudar y apoyar a Asociaciones Protectoras de Animales.

Lo que dicen de mí

Este es un mensaje de agradecimiento eterno, yo, que había estudiado todos vuestros videos hasta el ultimo detalle para hacer la adaptación entre Quito y Memphis, empezó siendo un poco complicada. María de vuestro equipo ha sido un ángel!! Nos ha sabido acompañar, enseñar, nos ha transmitido confianza cuando los avances eran mínimos, hemos conectado con ella a todos los niveles! y después de un mes enterito en fase 1 y otro entero en fase 2 lo estamos consiguiendo. Lo dicho gracias a María, a ti Laura y a tu equipo por hacer el mundo un poco mejor.
Blanca y Sara
María entró en nuestras vidas una mañana en la que estábamos un poco desesperados por la entrada del último integrante en la familia, el pequeño Pepinot que junto con la mayor Coco hacían la pareja de hijos gatunos que siempre quisimos pero no supimos como hacer la mejor integración hasta que llegó María y nos dio las técnicas para entenderlos y establecer una relación entre ellos y nosotros mucho más sana y comprendida. Nos ayudó con Coco a entender cómo se sentía con Pepinot y a ponerle límites a Pepinot con respecto al espacio que necesitaba. Nos ayudó con la fórmula mágica de flores de Bach para que Coco no se pusiera tan tensa. Con la disponibilidad y disposición de María a la hora de ayudarnos hemos avanzado a pasos agigantados durante meses. Nos hacía balances y nos ayudaba a entender el lenguaje de los dos felinos. Estamos muy contentos con su ayuda y su alegría y forma de tranquilizar a los padres, nosotros. Muchas gracias María, por tu tiempo, tus enseñanzas y tu siempre disposición a ayudarnos en éste proceso.
Graciela
María es maravillosa. Aunque todavía no hemos finalizado el proceso, estamos muy contentos con su trabajo, su implicación y su constancia. Recomendaríamos sin dudar. Muchas gracias!
Natalia y Alexp
Ha sido una experiencia enriquecedora, las explicaciones y los pasos a dar han sido claros y concisos.
Gabriel

Nuestro trabajo se basa en la admiración, pasión, amor,
y sobre todo, el respeto por los gatos.

Te acompañaré, te protegeré y enseñaré a lo largo de todo tu camino. Te amaré hagas lo que hagas, porque veo a través de tus ojos al Ser. El Ser que habita tu cuerpo, es Amor. Te cuidaré y guiaré, como amigo, compañero y Maestro de Almas.

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